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Dónde ofrecemos nuestros servicios

Precios de las impermeabilizaciones

TIPO DE TRABAJOPRECIODIMENSIONES
Impermeabilización terraza y balcón1950 €60 m2
Impermeabilización de cubiertas y techos2400 €35 m2
Impermeabilización paredes310 €15 m2
Impermeabilización de fachadas2400 €100 m2
Reparación de infiltraciones en el tejado2900 €100 m2
Impermeabilización de balcón390 €18 m2

Estos precios son aproximados y pueden variar en función de factores como la calidad de los materiales utilizados en la obra, el tamaño, la duración…

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Información útil

Si usted no quiere tener problemas con el moho y la humedad en su casa, es muy importante tener el techo y las paredes impermeabilizadas. De esta manera, usted podrá proteger su hogar de las infiltraciones de una manera efectiva y duradera.

Zonas que necesitan ser impermeabilizadas

Si dispone de terraza debe disponer de una buena impermeabilización para evitar la infiltración de agua cada vez que llueve, infiltraciones que puedan causar graves daños a los suelos inferiores y a las estructuras externas e internas de la vivienda, y la aparición de manchas de humedad en las paredes debido a la impermeabilidad al vapor de la cubierta y a la consiguiente formación de condensación.

impermeabiliza una terraza

Para ello, la impermeabilización a base de materiales aplicados en forma líquida es especialmente adecuada porque permite rellenar perfectamente todas las fisuras presentes y no eliminar el pavimento existente y el subsuelo en el mortero, reduciendo en gran medida el tiempo y los costes de ejecución y eliminando la molestia de la eliminación en vertederos del material resultante.

Alternativamente, se puede utilizar la clásica membrana bituminosa impermeabilizante acompañada de una barrera de vapor subyacente, que se aplica no sólo sobre la losa, sino también a lo largo de todo el parapeto de la terraza y sobre la que se debe colocar la nueva solera y el nuevo pavimento.

Preste atención, sin embargo, a puntos críticos como las uniones entre las láminas bituminosas y las aberturas de salida del agua, donde existen grandes variaciones térmicas e higrométricas que podrían causar daños a la membrana impermeabilizante.

Parte de la casa sometida al mayor riesgo de infiltración cada vez que llueve o nieva y cuya impermeabilización, por tanto, es imprescindible es, sin duda, la cubierta que está constantemente expuesta a la lluvia y a la nieve, en definitiva, a todos los fenómenos meteorológicos.

Por lo tanto, si se protege adecuadamente, no habrá infiltraciones que puedan poner en peligro la estructura portante del edificio, ni la formación de moho y condensación, ni la infiltración de polvo e insectos en el ático.

Esto es particularmente útil si se ha hecho habitable y se ha de mantener un alto nivel de confort de vida.

La impermeabilización debe realizarse en la cara exterior de la cubierta para evitar la formación de humedad por condensación presente en la mampostería y, por tanto, del moho, mediante la colocación de láminas impermeabilizantes y transpirables sobre los paneles aislantes de los áticos, cubiertas ventiladas y cubiertas inclinadas, de tejido no tejido de poliéster, capaces de crear una barrera protectora contra el paso del agua, pero permeable al vapor y al aire (la estructura del techo permanece seca) o una vaina transpirable, que resiste el agua de lluvia, facilita la evaporación de la humedad que consigue pasar el freno de vapor y protege de la acción del viento y de la entrada de polvo e insectos, o, finalmente, una vaina bituminosa.

Otra parte de una casa más expuesta a la intemperie y al riesgo de infiltración de agua, humedad y condensación, además del techo, son sin duda las fachadas y paredes exteriores.

Si no están adecuadamente protegidos, están sujetos a todas estas tensiones externas y corren el riesgo de agrietarse con el tiempo, facilitando así la infiltración.

Existen muchas soluciones para la impermeabilización de las paredes exteriores de un edificio, desde pinturas especiales hasta compuestos aislantes, pero entre todas la mejor solución es la capa impermeabilizante que además de protegerlas de los riesgos de condensación e infiltración de agua es capaz de aislarlas térmicamente.

A continuación, se aplican paneles especiales de aislamiento e impermeabilización en las paredes exteriores, recubiertos con morteros adhesivos precoloreados o equipados con una red de puertas de yeso para llevar a cabo el acabado tradicional deseado, o una capa consistente en una barrera de vapor, un material aislante y una vaina impermeabilizante.

Otra parte de una casa que no puede prescindir de la impermeabilización es el baño y la ducha: existe un alto riesgo de daños por humedad, infiltración y agua estancada si el plato de ducha no está perfectamente sellado con silicona antimoho blanca a lo largo de las paredes de la cabina de ducha o una perfecta impermeabilización del soporte y de las baldosas sobre las que se batirá el agua de la ducha en el caso de un plato de ducha de suelo enrasado.

Para ello, lo ideal es un impermeabilizante a base de polímeros de poliuretano que, aplicado en forma líquida y fría, aprovecha la humedad ambiental para crear una membrana hidrófuga continua y compacta, por lo que resulta ideal en un lugar como el baño, y en particular en la ducha, donde es fácil encontrar agua corriente y estancada.

¿Por qué es importante la impermeabilización?

La práctica de la impermeabilización (de terrazas, tejados planos o inclinados, azoteas, cimientos, paredes y balcones, piscinas, suelos y duchas) es una intervención fundamental a realizar en la construcción, mantenimiento y rehabilitación de una vivienda.

 

Razones y motivos para impermeabilizar 

La impermeabilización de todas estas partes de una casa permite protegerla de muchos factores externos perjudiciales para la salud del edificio y evitar muchos riesgos. Veamos en detalle cuáles son.

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Existen varias técnicas, (spray, sobretodo, frío, empuje negativo o contra empuje osmótico, con poliurea, con vaina bituminosa o pizarra, con resina, PVC, ecológico), pero todas tienen el mismo objetivo: proteger de los agentes atmosféricos externos e impedir la infiltración de agua en las capas inferiores desde el exterior hacia el interior, desde arriba hacia abajo (desde las paredes, desde los suelos, desde el tejado plano o el ático, desde las terrazas hasta el techo del piso inferior) y, en el caso concreto de las duchas, evitar el estancamiento del agua, la inundación del cuarto de baño y la infiltración en las paredes y en el suelo.

Otros riesgos que evita una buena impermeabilización es el del moho, la condensación y la humedad, principales enemigos de la salud del medio ambiente.

Así pues, la impermeabilización, además de eliminar el problema de la infiltración que con el paso del tiempo puede provocar una reducción significativa de la comodidad de las viviendas o incluso graves daños estructurales en los edificios, limita también la relativa a la formación de condensación y moho, especialmente en ambientes muy húmedos como baños y cocinas y dormitorios llenos de vapores nocturnos.

Las mejores empresas de impermeabilización respondemos tus dudas

¿Cuándo es mejor solicitar una obra de impermeabilización?
 

Lo ideal es que la casa se impermeabilice antes de la temporada de lluvias, es decir, al final de la primavera o durante el verano.

Esto le evitará incurrir en múltiples gastos cuando llueve (con el riesgo de que el material no se arregle completamente), y estará protegido de cualquier daño a la pintura, muebles y estructura causado por la humedad y las fugas.

Por lo tanto, se aconseja comenzar las obras al menos un par de meses antes de la estación de lluvias, pero si se ha hecho de otra manera, todavía hay una solución, ya que hay varios agentes impermeabilizantes disponibles que se pueden aplicar incluso durante los períodos de lluvia.

Hay varios tipos de productos en el mercado:

  • Acrílico
  • Asfáltico
  • Prefabricados
  • Productos a base de cemento

Empresas especializadas recomiendan diferentes agentes impermeabilizantes en función del material utilizado en la construcción de cada edificio. Muchos proveedores necesitan conocer la superficie a impermeabilizar para poder ofrecer un presupuesto definitivo, ya que los costes de aplicación pueden variar en función de la estructura, limpieza, eliminación de una impermeabilización anterior, etc. Los costes de aplicación pueden variar en función del material a impermeabilizar.

¿Cómo resolver el problema de la humedad sin impermeabilizar?

El primer paso es eliminar la fuente del problema. El techo o las paredes con manchas miran hacia afuera o hacia un espacio interior (otra habitación en la misma casa o en un apartamento cercano).

impermeabilizar humedadesSi miran hacia el exterior, es probable que haya grietas o fisuras que causen infiltración. Estos pueden ser pequeños, resultando en manchas, o más grandes.

En este último caso, si la infiltración es en el techo, eventualmente causará fugas, por lo que es necesario reparar el daño antes de pintar la pared.

Lo mismo se aplica si la superficie está orientada hacia el interior. El paso de la humedad se debe generalmente a una tubería rota o a una pared con filtraciones que conducen a una habitación con mucha humedad, como la cocina o el baño.

Por lo tanto, el daño debe ser reparado para evitar que se repita el problema. Una vez reparado el fallo, se debe eliminar la mancha. Para ello, basta con raspar y lijar la superficie para eliminar cualquier rastro de moho u otros residuos de humedad.

Después de eliminar la mancha, se procede al último paso: la aplicación de la nueva pintura. Es aconsejable utilizar una pintura resistente a la humedad o al moho para evitar la aparición de nuevas manchas.

Incluso si el problema se ha resuelto antes de la impermeabilización, esta es una forma de protegerse contra cualquier problema nuevo o contra la acumulación de humedad en áreas sin buena ventilación.

Técnicas y materiales utilizados para la impermeabilización

1. Por aspersión

Alternativa a la impermeabilización clásica con una o dos capas bituminosas, ésta técnica de protección por pulverización utiliza resinas y espumas de poliuretano reforzadas con fibra de vidrio que se aplican por pulverización sobre las superficies a impermeabilizar con pequeños cilindros o mediante un compresor dotado de bomba si la superficie a tratar es grande.

Ventajas:

empresas de impermeabilizacionLa principal ventaja de este tipo de impermeabilización es que no requiere intervenciones invasivas, ya que no requiere la demolición de la capa preexistente y dañada de la membrana impermeabilizante en suelos o paredes, sino que se puede aplicar directamente sobre la superficie de forma práctica, rápida y versátil (el poliuretano, de hecho, se adhiere a cualquier tipo de material, desde baldosas a cemento, desde el revestimiento existente a baldosas, incluso a acero o estructuras pintadas).

Además, puede crear superficies transitables, perfectamente resistentes a la intemperie, a las lesiones, a las grietas, totalmente impermeables al agua, altamente aislantes al calor (por ello, la impermeabilización por aspersión con resinas y espumas de poliuretano permite beneficiarse de la deducción del IRPEF del 65% para las intervenciones destinadas a ahorrar energía), transpirables (no impiden la fuga de vapores), muy finas incluso si están formadas por varias capas, sin juntas visibles y, por lo tanto, con un excelente efecto estético.

2. Capas de Impermeabilización

Esta técnica de impermeabilización es muy sencilla y consiste en el acoplamiento de membranas impermeabilizantes bituminosas o a base de polímeros, una capa de poliestireno expandido (EPS) o poliestireno extruido (XPS) simple -en la función inversa- que actúa como aislante térmico y una capa de tejido no tejido como barrera de vapor, o la instalación de paneles o rollos de poliestireno expandido que ya tienen una capa de alquitrán impermeabilizante en su cara superior.

Se puede encontrar tanto por encima (impermeabilización en caliente) como por debajo del aislamiento (impermeabilización en reversa).

Ventajas:

La capa de impermeabilización y aislamiento térmico se coloca siempre fuera de las superficies a impermeabilizar (tejado, altillo, paredes, terraza). 

La impermeabilización del sobretodo tiene muchas ventajas: protege contra las oscilaciones de la temperatura exterior y las inclemencias del tiempo, aumenta significativamente el confort de vida al eliminar los puentes térmicos, permite el ahorro de energía, aísla desde el punto de vista térmico y acústico y protege contra la condensación, la humedad y el moho.

3. En frío

Este tipo de impermeabilización se denomina fría porque no requiere el uso de una llama abierta para fijar la membrana impermeabilizante ni el uso de maquinaria que calienta el material a aplicar sobre las superficies a tratar. En el tipo de impermeabilización en frío encontramos por tanto:

  • impermeabilización con una membrana autoadhesiva bituminosa o polimérica prefabricada (PVC o polietileno), luego se pega a la superficie de colocación mediante simple presión a temperatura ambiente, sin necesidad de llama o acompañada de un adhesivo bituminoso al agua aplicado en frío que, aplicado sobre la superficie de colocación con rodillo o brocha, garantiza la perfecta adherencia de la membrana impermeabilizante al soporte;
  • Impermeabilización en frío de poliurea, una técnica sencilla, rápida y económica que también se puede realizar en modo bricolaje con rodillo, brocha o airless;
  • Impermeabilización a base de polímeros de poliuretano aplicados en forma líquida y fría que permite obtener una membrana impermeabilizante continua, elástica y a la vez compacta, sin juntas ni puntos de discontinuidad, que se forma aprovechando la humedad ambiental, por lo que es perfecta incluso en ambientes muy húmedos.
Ventajas:
  • Su uso no daña el material subyacente si es sensible al chorro caliente de la llama.
  • No libera gases malolientes y nocivos y vapores de condensación si se inhala como ocurre durante el “soplete”.
  • Es perfecto si se prohíbe el uso de llamas abiertas, por ejemplo cuando la superficie de colocación está hecha de madera o de material aislante sensible al calor o en las inmediaciones o en la estructura del edificio hay productos altamente inflamables.
  • Permite una instalación muy rápida y práctica, y también es seguro porque elimina el riesgo de incendio debido a la utilización de llamas abiertas.
  • Garantiza la perfecta adherencia de la capa impermeabilizante al soporte, se adapta a la mayoría de los materiales.
  • No altera las características físico-mecánicas de las membranas impermeabilizantes al no sufrir deterioro por aplicación en caliente.
  • Permite dividir la membrana impermeabilizante en varios sectores para poder controlar mejor la instalación y el rendimiento en uso, evitando aquellos fenómenos típicos de la aplicación en caliente de la impermeabilización por una adherencia imperfecta al soporte (la mancha de humedad se encuentra muy lejos del punto de infiltración real del agua).

Impermeabilización con empuje negativo u osmótico en contraempuje

Es un tipo de impermeabilización que actúa sobre las superficies del lado opuesto a la infiltración donde el agua y la humedad, por ósmosis, tienden a desprender la capa impermeabilizante del sustrato, frente al empuje positivo que actúa en cambio para contrarrestar la presión del agua sobre la parte frontal de las superficies impermeabilizadas y por tanto sobre el mismo lado de la infiltración. 

El empuje negativo o la impermeabilización osmótica en contrapropulsión es, por tanto, adecuada para la albañilería contra el suelo en salas subterráneas, subsuelos de cemento, redes y estructuras de contención y cimentación, suelos de hormigón armado, fosos de ascensores, túneles de servicio expuestos al contacto con el agua y la humedad.

Ventajas: incluyen la facilidad y rapidez de aplicación con brocha, rodillo y espátula, una excelente impermeabilización y elasticidad, adherencia a los diferentes tipos de soporte y un bajo impacto ambiental.

Impermeabilización con poliurea

Esta técnica de impermeabilización consiste en el uso de poliurea, un recubrimiento elastomérico formado por una molécula de urea bisustituida utilizada como impermeabilizante, que se aplica por pulverización, por método en caliente, con máquinas vaporizadoras específicas b-mixer a alta presión, o en frío, por rodillos o airless.

Tiene muchas ventajas: instalación muy rápida, endurecimiento más rápido (4-12 seg.) y posibilidad de caminar sobre ella (60 seg.) que ahorra tiempo y mano de obra, perfecta adherencia a cualquier tipo de soporte, incluso metálico (esto evita cualquier posibilidad de infiltración de agua y pasarelas bajo la propia membrana, lo que ocurre frecuentemente con la impermeabilización mediante vainas), creando una capa fina monolítica continua, inmediatamente impermeable, aislante térmico y de larga duración que puede cubrir incluso superficies complejas (incluso verticales) que son difíciles de tratar con otros tipos de productos, ya que con muchos rincones ocultos y gargantas remotas, alta resistencia química y mecánica, altas temperaturas y cambios de temperatura, abrasión e impacto, grietas y fisuras, desgarros y calzadas, impermeabilidad total al agua, antideslizamiento y transpirabilidad.

Impermeabilización con membrana bituminosa

Es una técnica de impermeabilización simple y rápida, perfecta para terrazas, tejados, balcones y cornisas (de hecho, es la más utilizada), que utiliza capas de vainas bituminosas, es decir, resultantes de la destilación de aceite, de 3 a 4 mm de espesor o más (en el caso de aplicación monocapa), generalmente prefabricadas (en el mercado se encuentran en rollos) y a menudo reforzadas (fibra de vidrio, fibra de vidrio, tejido, poliéster no tejido, etc.).

La colocación de la vaina bituminosa, tanto monocapa como bicapa, se realiza en frío, si es adhesivo o en caliente, mediante un “soplete”, es decir, con un lanzallamas, después de haber aplicado previamente dos manos de imprimación líquida bituminosa (el alquitrán), que sirve para garantizar un mejor agarre de la vaina sobre el soporte a impermeabilizar. 

Este tipo de impermeabilización, sin embargo, requiere una instalación perfecta, especialmente en puntos críticos como juntas y solapas, y un mantenimiento continuo.

Ventajas:

  • Las ventajas de la impermeabilización con membranas bituminosas incluyen una buena resistencia mecánica del material impermeabilizante.
  • Una buena protección térmica, una elevada elongación a la rotura útil en caso de contracción del material sobre el que se ha colocado la membrana bituminosa y la posibilidad de caminar gracias al elevado espesor de la membrana utilizada.
  • Una instalación bastante sencilla, la posibilidad de encolado en total adherencia, que permite limitar el paso del agua en caso de fugas y facilita el atemperamiento de las infiltraciones.
  • Una excelente estanqueidad en el tiempo, así como durabilidad y resistencia ya que la membrana bituminosa está hecha de un material inerte que no es biodegradable.

Impermeabilización con resina

Esta técnica de impermeabilización, muy práctica y versátil, que no requiere la demolición invasiva de la superficie existente ni de la vieja vaina, utiliza resinas innovadoras especialmente diseñadas, en algunos casos reforzadas con fibra de vidrio o tejidos especiales de vidrio. 

La impermeabilización con resina tiene la ventaja de que se puede aplicar fácilmente sobre todo tipo de superficies y crea una capa impermeable que se puede pisar, es transpirable (es decir, permite el paso del vapor de agua y, por lo tanto, evita la aparición de manchas de humedad) y es perfectamente resistente a la intemperie, formada por un único bloque continuo que se adapta a las condiciones específicas del edificio.

¿Cómo funciona la impermeabilización ecológica?

Elección del material

Para crear una impermeabilización ecológica, primero es necesario obtener materiales impermeabilizantes eco-compatibles específicamente diseñados para la construcción ecológica.

Se pueden encontrar en el mercado entre los materiales impermeabilizantes ecológicos:

  • Membranas hechas de poliolefinas flexibles, es decir, sin plastificantes ni metales pesados;
  • Membranas impermeabilizantes Derbipure® compuestas principalmente de materias primas vegetales (mezcla a base de aceites vegetales residuales de la industria alimentaria y resinas de pino de la industria papelera) y absolutamente exentas de betún, reforzadas con una armadura compuesta impregnada con un recubrimiento acrílico altamente reflectante;
  • Vainas de poliuretano de dos componentes a base de agua sin VOC (compuestos orgánicos volátiles);
  • Revestimientos de polietileno y polipropileno, productos geotextiles compuestos de dos, tres o cuatro velos no tejidos muy finos, hechos de material termoplástico como el polietileno (PE) o el polipropileno (PP), acoplados a una película plástica microperforada o microporosa, y posiblemente reforzada con una estructura reticular de polietileno;
  • Geocompuestos de bentonita, paneles de cartón biodegradable con bentonita fabricados mediante la inserción de una capa de bentonita en granulado, convenientemente mezclada con un adhesivo hidrosoluble, entre dos láminas de cartón y que aprovechan las características de este mineral arcilloso que, en contacto con el agua o la humedad, se convierte en un gel totalmente impermeable, perfecto por lo tanto para estructuras sobre el suelo o sobre el suelo constantemente húmedo;
  • Colocación de geotextiles de bentonita, tejidos no tejidos de polipropileno o polietileno y geotextiles porosos intercalados con una capa de bentonita sódica natural.

Preparación de la superficie

En este punto, la superficie a impermeabilizar debe prepararse eliminando, si es necesario, la antigua impermeabilización desgastada y limpiándola escrupulosa y minuciosamente de suciedad, polvo, escombros, adherencia y grasa y eliminando posibles grietas, posibles acumulaciones de agua, partes irregulares y salientes y esquinas excesivamente puntiagudas, así como retirando temporalmente los tubos y tuberías para crear una superficie uniforme, continua y despareja: de esta forma, la nueva vaina puede adherirse mejor al soporte sin doblarse.

Posible aplicación de la imprimación

Si el material de impermeabilización elegido lo requiere, se aplican dos manos de imprimación líquida para asegurar un mejor agarre de la vaina que se va a colocar en la parte superior. Evite aplicar demasiada cantidad y espere a que se seque completamente antes de pasar a la siguiente fase del trabajo.

Instalación

El trabajo termina con la colocación de las vainas y membranas, teniendo cuidado de mantener los solapamientos entre los distintos rollos de al menos 10 cm y solapas de al menos 15 – 20 cm en las paredes verticales.

Dependiendo del tipo de material impermeabilizante utilizado (en forma de rollos o líquido), la aplicación se realizará en frío con adhesivos o con brocha, rodillo, espátula o sistema airless respectivamente.

Atención a las condiciones climáticas e higrométricas: no debe esperarse lluvia durante o después de la aplicación de la impermeabilización ecológica y no debe haber temperaturas inferiores a 0° y superiores a 40° C o humedad relativa excesiva.

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